Childrain es un grupo vasco difícil de catalogar dada su gran variación de composiciones, aunque siempre ha sido reconocido principalmente dentro del Groove Metal. Formado por una banda entre hermanos, su sonido no dista mucho de lo que han realizado bandas como Sepultura, Pantera, Gojira o Lamb of God. Centrándonos ya en el nuevo trabajo que nos presentan los de Vitoria-Gasteiz, cabe destacar antes de nada la clara orientación melódica y progresiva que ha tomado el grupo en este trabajo titulado The Silver Ghost. Recuerdo que, allá por 2015, pude ver a este quinteto de Euskadi en el Live For Madness Metal Fest de Ourense, y me dejaron completamente impresionados con su potentísimo directo y su música orientada en aquel entonces más hacia el Melodic Death Metal y géneros más extremos, hecho que reflejaron en su anterior disco Matheria, y también en A Fairy Tale For The Dissent y Life Show. El presente disco muestra una clara madurez compositiva, con más arreglos instrumentales y voces más limpias que en sus antiguos trabajos, pero manteniendo la esencia Groove que siempre han presentado a lo largo de los años.
Desgranando un poco más el presente disco, nos encontramos en primer lugar con Wake The Ghost, un tema perfecto para abrir el disco por su tónica “in crescendo” que experimenta la instrumentación, hasta que por último rompe la voz a medio camino entre lo gutural y lo melódico, y que nos recuerda mucho a su anterior etapa de Matheria. El siguiente tema, Savior of the Earth, la primera vez que lo escuché me recordó mucho a sus vecinos Berri Txarrak en cuanto a la afinación y distorsión de las guitarras junto con la batería sin apenas doble bombo, y las voces perfectamente entonadas al estilo de los navarros.
En la siguiente canción, The Valley of Hope, encontramos ya una reminiscencia más cercana a Gojira, en la que podemos disfrutar de ritmos rápidos estilo Hardcore melódico con sus respectivos tempos de Groove a mitad de canción. En el cuarto tema, Saturnia, de nuevo nos encontramos con una gran predominancia de voces limpias y cambios de tempo, adoptando más que nunca un estilo y sonido moderno, típico de grupos de esta última década de Metalcore Melódico.
The SIlver Walker, el siguiente tema, nos sorprende con unos riffs pesados a la vez que melódicos, empastada con una muy buena batería y voz gurutal/limpia, transmitiendo mucho poderío y fuerza. Interstellar nos muestra de nuevo una base rítmica muy potente, con una línea vocal entonada y melódica casi en toda su totalidad. La siguiente canción, Eon, empieza como una auténtica ametralladora en la batería, acompañada de una instrumentación brutal, también aportando mucha melodía vocal sin apenas gutural. La penúltima canción, Ten Thousand Moons, continúa en una línea instrumental muy cañera, esta vez aportando más guturales en la voz. Por último, con Omega nos despedimos en una tónica similar a la de los últimos temas presentados, mezclando mucho Groove con partes progresivas y partes casi acústicas, junto con voces guturales y limpias.
En definitiva, un disco muy completo en el que encontraremos alguna variedad, sobre todo vocal, con respecto a sus anteriores trabajos, yéndose a un estilo más melódico y limpio perfectamente empastado con los demás instrumentos. Cabe destacar también que el próximo mes de abril se embarcarán en una gira por toda Europa donde presentarán este nuevo trabajo dando un paso más en su carrera, acompañados ni más ni menos que por Six Feet Under.